1. No esperes poder dejar de ir al supermercado, pero disfruta de otras muchas ventajas
Lo primero que debes saber es que tener una huerta en tu balcón o terraza tiene muchos, muchos beneficios, pero no te evitará tener que bajar a la calle con la lista de la compra. Aprovechar tu espacio reverdeciéndolo, redescubrir las verduras, disfrutar de una hobby saludable y transformar tu forma de alimentarte son algunas de las ventajas.
2. Conoce tu espacio antes de sembrar o plantar
La orientación, las horas totales de luz o el viento nos marcan las posibilidades y podremos evitar frustraciones innecesarias en nuestra huerta. Las mejores condiciones son las de mayor luz como las orientadas al sur, pero si tienes una orientación norte, cultivos como la acelga, la lechuga o el rabanito serán tus aliados.
3. Construye un buen hogar para las plantas
Considera la calidad de los materiales donde vas a cultivar, macetas y sustrato. Las plantas siempre nos sorprenden con su capacidad de crecimiento, pero si se lo ponemos fácil, mucho mejor.
4. Cada uno necesitamos nuestro propio espacio
Y las cultivos también. No necesita el mismo volumen de tierra una acelga que una berenjena. Descubre las necesidades de cada planta para que te puedan ofrecer lo mejor de ellas. Podrás ahorrar en espacio combinándolas correctamente según su desarrollo o temporalidad. ¡Conoce cuáles conviven mejor!
5. Respeta los calendarios de siembra y plantación
Elegir un mal momento para la plantación puede arruinar nuestro objetivo. ¿Qué no puedo plantar tomates en enero? ¿Pero si los encuentro en mi mercado? Descubre la temporalidad de los cultivos.
6. Mejora tu poder de observación
Disfruta día a día de la evolución de tus cultivos, desde la germinación de la semilla hasta la primera flor. Verás que esa capacidad de observación se trasladará al resto de plantas con las que te cruces. ¡Descubre el mundo vegetal!
7. Las lechugas y cebollas también tienen flores
Repasa esas clases de botánicas y vive el ciclo completo de una planta en directo. ¡Además podrás recoger tus propias semillas para la siguiente temporada!
8. Las hortalizas no son todas iguales
Descubre la gran diversidad en formas y tamaños de las hortalizas, y lo bien que saben. Por criterios de mercado, muchas son desaprovechadas debido a razones estéticas que no afectan a su calidad nutricional o sabor
9. Hay maneras y maneras de cultivar
Aprovecha tu pequeña huerta para descubrir la agricultura ecológica. Hay distintas maneras de producir según los fertilizantes y medios para tratar plagas y enfermedades. Tú puedes hacerlo de una manera sostenible y respetuosa con tu medio ambiente. ¡Práctica la agricultura ecológica!
10. Tu pequeña huerta cambiará tu manera de comprar
Unas pocas macetas como huerta pueden cambiar por completo tu perspectiva a la hora de hacer la compra. ¿Pimientos fuera de temporada? ¿Calabacines todos iguales? ¿Tomates de muy lejos? ¿Zanahorias sin sabor? ¡Qué ganas de empezar con mi huerta!
Si quieres comenzar con tu huerta urbana apúntate a uno de nuestros talleres de huerta ecológica en balcones y terrazas. Si quieres que te asesoremos y ayudemos con el montaje, contáctanos!